Los problemas físicos y la baja producción con el madero como consecuencia de lo primero parecen haber quedado en el pasado para José Altuve, que actualmente es el bate más encendido dentro de la alineación de los Astros de Houston y uno de los más productivos en la Liga Americana, por tal razón fue nombrado Jugador de la Semana en el joven circuito.
El segunda base encabezó todas las Grandes Ligas en promedio ofensivo con .520 luego de soltar 13 inatrapables en 25 visitas al plato, también lideró en porcentaje de embasarse con .613. Además, dejó nueve anotadas, tres dobles, un cuadrangular, seis empujadas y pegó incogibles en todos los juegos de la semana a excepción del último el día domingo. Esta es la cuarta vez en su carrera que se lleva tal distinción, y la primera desde la campaña 2017.
“Astroboy” vive su mejor momento del 2023 al mostrar su mejor versión cuando va al plato, tras acumular promedios de .440/.525/.660 en lo que va de agosto con 13 anotadas, cinco dobles, par de jonrones, ocho impulsadas y cinco bases robadas en 12 compromisos disputados antes de la jornada del 15 de agosto.
De igual forma, llegó a tener seguidilla de 14 juegos al hilo pegando imparable entre el 28 de julio y el 12 de este mes, ostentando en ese periplo promedio ofensivo de .434 gracias a 23 incogibles conectados en 53 veces al bate.
“Me siento bastante bien. Me siento saludable, gracias a Dios, y feliz de jugar ahora todos los días, sintiéndome mejor en el plato, en defensa y corriendo las bases. Cada día mejor y mejor”, expresó Altuve recientemente al periodista Joe Trezza de MLB.com. “Está luciendo mejor. Solo era cuestión de tiempo”, agregó por su parte el manager Dusty Baker.
Ese accionar además le ha permitido al oriundo de Puerto Cabello ingresar a una lista selecta de los 10 segunda bases con más juegos de cuatro hits en la historia de grandes ligas, al totalizar 35 encuentros, lista que completan Charlie Gehringer (57), Nellie Fox, Billie Herman y Eddie Collins (41), Nap Lajoie (39), Robinson Cano, Red Schoendienst y Robert Hornsby (38), y Roberto Alomar (34), esto según el portal Baseball Reference.
Por otro lado, el camarero de 33 años de edad está cerca de alcanzar más números redondos, pues está a solo cuatro inatrapables de los dos mil, a nueve de las 300 bases robadas y a ocho dobles de los 400. Ya esta temporada alcanzó los 200 cuadrangulares y las mil anotadas.
Con este performance no solo colabora con su equipo en la carrera por llegar a los playoffs, sino que abulta aún más sus números y su carrera para en un futuro ser un fuerte candidato a entrar al olimpo del béisbol, el Salón de la Fama de Cooperstown.