Con la segunda mitad de la temporada andando en Grandes Ligas muchas expectativas se empiezan a agudizar, sobre todo con aquellos peloteros que lograron cosas importantes antes del Juego de Estrellas, y ese es el caso de Francisco Álvarez.

El careta de los Mets de Nueva York está teniendo una gran temporada de debut, tal como se le avizoraba al ser nombrado el prospecto número de todo el béisbol según MLB Pipelines, y hasta ahora ha cumplido con creces, más allá de los ajustes que ha tenido que hacer como todo pelotero joven. 

Álvarez nuevamente hizo gala de su poder el pasado martes 18 de julio cuando conectó par de cuadrangulares en la victoria 11x10 ante los Medias Blancas de Chicago, para ser la tercera vez en la campaña que despacha dos pelotas fuera del parque en un mismo encuentro, aparte impulsó cuatro carreras.

Luego de ese encuentro, el receptor presentaba average de .368 en este mes de julio al conectar 14 imparables en 38 turnos, de los cuales siete han sido vuelacercas, además acumulaba nueve anotadas, 13 llevadas al plato, .442 en porcentaje de embasado, .921 de slugging y 1.363 de OPS, dejando en evidencia los ajustes que ha hecho, principalmente en la parte inferior de su cuerpo.

“Estaba rotando mucho el pie de adelante”, le expresó el venezolano al periodista Bill Ladson de MLB.com tras finalizar el encuentro. “Ahora que tengo más control sobre eso, siento que tengo mejor control de mi swing”.

Con esa gran actuación, para el momento el criollo ostentaba 19 jonrones en la campaña siendo esta la mayor cantidad para un receptor en todas las mayores. En este sentido, proyecta superar los 26 estacazos de Ronald Acuña Jr en 2018, que representan la mayor cantidad para un novato venezolano en una temporada.

Y hablando de implantar marcas, esos 26 también significan el mayor número de cuadrangulares para un receptor de 21 años o menos, implantado por el legendario Johnny Bench en 1969 con los Rojos de Cincinnati.

“No le estoy prestando mucha atención al récord”, expresó el magallanero cuando se le consultó al respecto. “Quiero seguir saliendo al terreno. Los juegos aún tienen mucho significado, y espero poder conectar más jonrones. No sé cuántos conectó Johnny Bench, y no estoy enfocándome en eso ahora mismo”.

No obstante, Álvarez sigue causando un gran impacto no solo en la afición de la Gran Manzana, sino en sus propios compañeros que se han mostrado sorprendidos por la gran producción y el poder que ha podido mostrar a su corta edad.

“Se está divirtiendo”, expresó su compañero y campocorto Francisco Lindor. “Cuando te diviertes, el escenario nunca es muy grande para ti. Se está educando así mismo, está aprendiendo y se está divirtiendo. No está dejando que los altibajos lo afecten”. 

Por lo pronto, el joven careta sigue labrando su camino en el mejor béisbol del mundo, con su poder y su mascota, para seguir sorprendiendo a propios y extraños.

“Está teniendo un buen año. Estoy orgulloso de él y tenemos mucho béisbol por jugar”, comentó por su parte el manager de los Mets Buck Showalter.